Muchos docentes opinan que algunas teorías educativas no les permiten construir un mundo mejor desde la enseñanza. De hecho poca gente contrasta estas teorías con datos reales. Para mejorar el sistema educativo son necesarias más demostraciones y menos opiniones. Hay que observar los hechos probados y sistematizarlos. He aquí cartas de prensa, artículos en los medios y capítulos numerados que ofrecen un amplio corolario de datos contrastados para mejorar realmente la enseñanza y la sociedad.
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jueves, 15 de septiembre de 2016
FRACASO ESCOLAR 29. Nos vamos de excursión
Una forma muy efectiva de conocer a los alumnos no es en el aula, es fuera de ella. De todas formas un abuso de las excursiones perjudica el ideario escolar al romper la rutina para el aprendizaje. Sólo en su justa medida estas salidas son una ocasión deliciosa para conocer como son nuestros estudiantes. El instituto condiciona su respuesta y sus acciones, en libertad en cambio se comportan con más naturalidad. Ejemplo de tales situaciones son las excursiones, los recreos y las colonias. Durante las excursiones, y para conocer mejor a los tutelados, hay que prestar atención a dos premisas, lo lúdico y el control. Juegos y bromas pueden crear que los alumnos se abran al docente, algo que potencia la confianza de los adolescentes hacia sus educadores. Recuérdese que los púberes cierran puertas con los mayores para abrirlas a la pléyade de su edad. Por tanto, las diversiones y los juegos ofrecen desplegar nuevos vínculos entre profesores y alumnos, la broma desarma mientras que la bronca la arma. Había un profesor de primero de la ESO que patentó el juego de voy pisando. Previamente explicado en clase, y con la confianza ganada de ésta, el docente lo aplicaba durante los desplazamientos a pie. El gran problema de andar con más de treinta alumnos por la calle son los rezagados. Por tanto, el juego de voy pisando resolvía tal lastre al pisarles, en sentido figurado, los talones por detrás. Tomado como un juego, los alevines de primero incluso deseaban ser pisados. Pero entre tanto juego y broma no se puede olvidar que los profesores son los máximos responsables de esos escolares fuera del centro, por lo que pasar lista a menudo es harto aconsejable. El extravío de un miembro del grupo afecta a todo el mismo, si uno falla, fallan todos.
El descanso entre las clases también proporciona ese espacio de observación de los escolares. Conocí a un maestro en Granollers que utilizaba las horas de patio para observar a sus alumnos para así conocerlos mejor. El recreo, sin ser un espacio ajeno al centro educativo, sí desinhibe a los escolares en gran medida y nos muestra su cara más real. Con igual objetivo se pueden organizar unas colonias a inicio de curso, sobretodo en primero de la ESO cuando llegan por primera vez al instituto. Todo ello, excursiones, observación durante los patios y colonias, son señales de un centro interesado en conocer a sus hijos para saber mejor como educarles.
Conocidos así a los alumnos, los profesores tienen una idea aproximada de cómo son sus chavales, algo que les debería permitir actuaciones lo más precisas posibles. Veamos, y según la tipología de cada púber, algunos ejemplos de pautas de intervención sobre ellos.
lunes, 12 de septiembre de 2016
Frakso skolar 28: ¿Qué importa más al púber?
Una profesora de Gavá me contó que una de sus tutorías preferidas era la que sigue. Escribía en la pizarra una serie de conceptos que luego sus bachilleres debían votar según sus intereses. Los términos eran libertad, belleza, amistad, amor, perfección, placer, fe, bien, promiscuidad, realidad, verdad, felicidad, virtud, positivo y blanco. Los más votados de todos ellos solían ser tres, la felicidad, la libertad y la amistad, he aquí los intereses de los púberes.
Pasados los comicios se les pedía a los alumnos que definieran esos tres conceptos que tanto valoraban. En ello aparecía el debate, los escolares no llegaban a un acuerdo sobre lo que era la felicidad, por tanto la profesora les proponía que pasaran al siguiente, a la libertad, en donde se encallaban nuevamente con matices. Por tanto, sólo quedaba abordar el tercero, el de la amistad pero otra vez ocurría lo mismo, y los escollos surgían sin dejar avanzar el debate. De repente, y de forma premeditada, la docente escribía los antónimos, de libertad esclavitud, de belleza fealdad, de amistad enemigo, de amor odio, de perfección imperfección, de placer dolor, de creyente ateo, de bien mal, de promiscuidad celibato, de realidad ideal, de verdad mentira, de felicidad tristeza, de virtud defecto, de positivo negativo y de blanco negro. Es decir, que esos conceptos se podían definir desde su contrario pero muy difícilmente desde la nada, ¿que por qué? Por que eran conceptos abstractos en gran medida dependientes de sus experiencias personales. Aquella mujer les dejaba pensar y debatir de nuevo con una intención muy singular, que los intereses de su edad surgieran y que vieran que eran pues muy distintos de los del mundo adulto. Para un adolescente la libertad es algo muy anhelado dado que no posee independencia económica, pero para un adulto la libertad implica muchas obligaciones que hasta le pueden robar su libertad. De igual forma hablaríamos de la amistad y de la felicidad. Así lo reflexionaba la profesora al final de la clase.
La conclusión es que todos los conceptos de libertad, belleza, amistad, amor, perfección, placer, fe, bien, promiscuidad, realidad, verdad, felicidad y virtud yacen bajo el prisma humano y por tanto resultan muy subjetivos, por ese motivo sólo ganan sentido ante su opuesto, ante su antónimo. Por eso también en el mundo hay mucha manipulación política con tales conceptos, pero lo importante de esta tutoría es que os percatéis que lo que ahora os resulta muy importante a vuestra edad, de adultos quizás cambie en función de las influencias que os rodeen. La edad y el entorno adulteran y limitan toda realidad.
Como siempre es cuestión de intereses. En fin, cualquier buen docente debe ser consciente de la asimetría entre las prioridades adultas y las de los púberes, algo que se aprende mucho mejor fuera del colegio. Vayámonos de excursión pues.
jueves, 8 de septiembre de 2016
Frakso skolar 27. La confianza NO da asco
Este libro empezó con la familia a inicio de curso. Luego hemos analizado como debe ser llevada un aula para sacar lo mejor de ella. Pero ahora cabe saber como conocer a los alumnos para mejorar su trato, potenciar su confianza y optimizar su enseñanza. Saber si un estudiante es o no es capaz de aprender con normalidad resulta básico en infantil. Si allí no se detectó ni trató la disfunción, luego en secundaria fracasará estrepitosamente. Por otro lado, y si un escolar posee unas capacidades normales, hay que conocerlo para llegar lo mejor posible a su interior. Durante los siguientes apartados se destilarán diferentes técnicas y estrategias que institutos y médicos desarrollan con éxito a tal efecto. Los adolescentes todavía son barro a moldear por muy duros que ellos quieran mostrarse. Cruzar su escudo de defensa y conocer su espíritu nos dará la llave de su confianza. Educar resulta muy lento, pero sin confianza se vuelve eterno. Aquel estudiante que confía en su mentor se esfuerza para aprender con él. Es más, no espera un premio por hacerlo, sólo el reconocimiento personal por su trabajo y sus buenos resultados. En fin, que la confianza mueve gran parte del esfuerzo en toda buena enseñanza.
Me confiaba un amigo mío y profesor de tecnología que para conocer a sus alumnos más pícaros les ponía a prueba ya el primer día de clase. La práctica era muy sencilla, les lanzaba una ironía en medio de una explicación y observaba quienes la pillaban. Normalmente a principio de curso los alumnos viven con cierta tensión o distancia las peroratas de los docentes de tal manera que lo perciben todo con bastante seriedad. Luego las semanas aflojan el asunto y los escolares vienen ya más relajados al centro. Dicho lo anterior, y cuando los adolescentes empiezan el curso, un sarcasmo no lo suelen ni pillar ni entender, sólo los muy pícaros, y a menudo más inteligentes, lo hacen. Mi buen amigo con sólo observar la clase ya sabía quienes sí y quienes no.
Hay otros docentes que les encanta inundarse de papeleo para conocer a sus estudiantes, incluso redactan largas descripciones en la plataforma digital del centro. Luego pasan largos y tediosos cuestionarios a sus alumnos para saber de ellos. No obstante muchos de estos formularios a veces no mejoran las prácticas didácticas, solo las entorpecen. Un test breve resulta más eficaz que muchas respuestas sobre un papel. El docente antes mencionado utilizaba un cuestionario de observaciones muy visual y práctico. Para conocer a sus alumnos no les pedía el nombre del padre, de la madre o de su profesión, simplemente requería que marcaran una frase de cuatro posibles para conocer sus perfiles personales. Después, y con símbolos chiquitines, describía el alumno en su cuaderno de anotaciones, algo de una utilidad bárbara durante las reuniones de evaluación, o en las entrevistas con sus padres. Sólo con mirar aquella minúscula casilla aquel docente sabía todos los pormenores del alumno y sabía que añadir en el coloquio.
El cuestionario anterior consistía en una serie de preguntas con cuatro columnas a marcar. Éstas iban en orden de mejor a peor. Por tanto, una vez realizado el formulario, las casillas de la derecha delataban los problemas mientras que las de la izquierda correspondían a la normalidad familiar. Sólo con mirar y anotar los resultados de las celdas diestras bastaba para tener suficientes datos sobre el escolar. Preguntas como: ¿Durante toda la mañana qué desayunas?, ¿charlas mucho con tus padres? o ¿crees que tus padres acceden a tus demandas?, jalonaban este cuestionario.
Es muy importante que en primaria se detecten todas las anomalías posibles con un test o con observaciones objetivas. El modelo escolar finlandés, tan aplaudido por muchos, se fundamenta en gran parte en la detección prematura de patologías en el aprendizaje. En caso de hallarse la intervención resulta inmediata. Por ejemplo, si en primaria se detecta a un escolar con dificultades en la lectura, en menos de una semana ya está siendo atendido por un especialista. En nuestra península la cosa pasa por reuniones entre familia, asesores psicopedagógicos y el EAP. A veces se tarda un año hasta que se da luz verde a la intervención, es decir, que se pierden 365 días de terapia. En Finlandia, país con el menor fracaso escolar europeo, hay muy pocos psicólogos y trabajadores sociales destinados a diagnósticos. Quienes diagnostican y tratan a los niños son médicos y científicos expertos. Apruebe pues al docente que realiza una inspección de sus alumnos con un cuestionario como el que estamos comentando y que aconseja, en caso de sospecha, un diagnóstico por parte de un médico o científico. La detección de patologías reside sobretodo durante primaria, es allí donde más se deben detectar dislexias, problemas de lateralidad, visión errónea, sorderas u otros. Si ello no se hace en su centro, haga su demanda auque mucho me temo que muchas de esas disfunciones no las contempla el estado. A menudo, y si su lechón obtiene resultados bajos aun esforzándose, deberá consultar una opinión médica pagando. Detectados los problemas a tiempo pueden subsanarse, en caso contrario, y llegados a secundaria, el asunto se nos transmuta en un monstruo de muchas cabezas y de muchos quebraderos de éstas.
De todas formas, no se obsesione en hallar siempre una explicación médica a los malos resultados académicos de su chaval, no todo tiene una explicación clínica y quizás se trate de un mal hábito de estudio, constancia y esfuerzo. Para eso no hay fármacos, sólo voluntad educativa, rutinas de estudio y esfuerzo individual.
Los resultados del cuestionario anterior pueden ser transcritos a la libreta de notas con pequeños y visuales símbolos, algo que reduce gigantescos y pedantes informes que pocos educadores llegan a leerse. Me contaba el profesor que diseñó el test que para dislexia ponía Dlx., para posibles problemas de lateralidad una L al revés, para padres ausentes un Pa, para capacidad baja –C, para la falta de esfuerzo -T y así muchos más artefactos que resumían las más de cuarenta preguntas del formulario. La finalidad de tal concentración de información ya se remarcó anteriormente, poseer el perfil del adolescente en un cuadrito del bloc de notas ante cualquier reunión con otros docentes o con los padres. Pero lo mejor de una síntesis así no es para los adultos sino para los alumnos. Si durante la clase un alumno manifestaba un comportamiento anómalo mi profesor consultaba sus anotaciones concentradas y decidía como intervenir, si bronca, si amonestación, si nada o si conversa posterior. Cada individuo es un mundo, y saber como es un adolescente permite actuar según su interior, confianza e intereses.
martes, 6 de septiembre de 2016
INICI DE CURS AMB FALTA DE PROFESSORS
Com cada curs, els centres educatius públics comencen amb falta de docents a les seves plantilles. Com cada curs el Departament d'Ensenyament envia els interins a mig setembre. Com cada curs l'ensenyament públic va coix una vegada més. Davant aquesta flagrant estafa al servei públic, els sindicats educatius s'han unit. Professors de Secundària (SPS), CGT, UGT i CCOO han acampat davant el Departament d'Ensenyament de la Via Augusta de Barcelona. Els dies 5 i 6 de setembre romandran les 48 hores seguides. Diferents delegats d'aquests sindicats allí s'hi han plantat. Cal ara que la comunitat educativa catalana desperti. Que tal una visita? Que tal unes cartes a premsa? Que tal denunciar i fer pressió tots plegats?
http://www.abc.es/espana/abci-acampada-profesores-puertas-consejeria-5113781003001-20160906020003_video.html
lunes, 5 de septiembre de 2016
26. NOTAS SIN NOTAS, UF!!!
Otro punto que conllevó la detonación del esfuerzo fue la eliminación de las notas en primaria. Una de las ideas que trajo la reforma fue no traumatizar a nuestros alevines con el fatídico insuficiente o con el terrorífico muy deficiente. Así fue que se inventaron algo ambiguo, algo que potenció la destrucción de la cultura del esfuerzo. Con un necesita mejorar el alumno poco sabía si suspendía o aprobaba. De hecho nadie jamás fue perfecto y todo el mundo necesitaba mejorar. Algo parecido ocurría con el progresa adecuadamente, pero ¿muy adecuadamente?, ¿sólo adecuadamente?, ¿o un poco adecuadamente? Ahora en Cataluña ponen otras siglas con objetivos parecidos. Es obvio que sin notas informativas, padres e hijos vivirán relajados el paso por la primaria. Así que si uno todavía recibe las notas de su hijo en primaria con comentarios pero sin suspensos, bienes, notables o excelentes no estará informado en absoluto. En todo caso será una compasión benévola que no fomenta en absoluto la objetividad de los datos, todo lo contrario, como emoción embadurnará a los padres con un falso positivismo.
Por suerte la LOE erradicó la ausencia de notas a finales de 2007 y volvió a imponer las notas en primaria, algo que llevaban reclamando muchos maestros desde hacía doce años. Más valió tarde que nunca, aunque I.B. de la Asociación de Maestros Rosa Sensat insistía que las notas eran un error y que debía instaurarse de nuevo el necesita mejorar y el progresa adecuadamente, y vuelta a empezar. Así llegamnos al presente en donde de nuevo se vuelve a los items para evaluar a los escolares en Cataluña. Es decir que los políticos no han dejado de lado a algunos expertos. De hecho si uno leyera la letra pequeña de la LOE se daría cuenta que siguió existiendo la ausencia de notas durante ese primer año de aplicación. La obligatoriedad de puntuar de forma cualitativa y abandonar el necesita mejorar afectaba únicamente a segundo, cuarto y sexto, o sea la mitad de los cursos de primaria. Es decir, fue todo una verdad a medias, ¿o una mentira al 50 por ciento? En primero, tercero y quinto se mantuvo el necesita mejorar y el progresa adecuadamente, mientras que en el resto se ponían notas, ¿ven que desorden para informar? Por suerte, y en 2008, las notas en primaria se empezaron de nuevo a poner en todos los cursos. Ahora si en su escuela no recibe notas es lo que acontece, pero más importante es tener la certeza que no se regalan aprobados. Piense que al llegar a secundaria empezarán los problemas, porque allí sí deberán poner notas de verdad. De todas formas la ESO rebajó los niveles respecto a su predecesora la EGB. Pero no sólo a nivel de exigencia, sino en los cálculos de las medias. En marzo de 2007 el Ministerio de Educación y Ciencia prohibió que el cero figurara entre las calificaciones de la ESO. El ministerio estipulaba que las notas de los alumnos seguían una escala del 1 al 10 y que por eso debía eliminarse el 0. La eliminación de éste siempre halló otros ejemplos en la historia con consecuencias que todavía hoy estamos pagando. Durante el siglo VI d.C., y hundido por completo el Imperio Romano y su calendario, urgió crear uno de nuevo. Bajo el mandato del Papa Juan I, un humilde monje iletrado que estaba a las órdenes del vaticano, hizo lo que buenamente pudo. Dada la era cristiana en la cual se vivía, el nuevo calendario debía ajustarse al nacimiento de Cristo, pero primer problema, nadie tenía ni la más remota idea de cuando lo hizo éste. Dionisius Exiguus, nuestro monje, bajo la presión papal y el encargo impuesto, se inventó la fecha y con ella eliminó el cero del calendario.
Primero adjudicó el primer día del año al 1 de enero como en el antiguo calendario romano, luego asignó ese día como el día en que Jesús fue introducido en sociedad, su circuncisión. Tal ritual se realizaba siete días más tarde del nacimiento de cualquier lechón judío, así que la fecha del nacimiento quedó en el 25 de diciembre, casualmente el mismo día que el nacimiento de un dios que la mayoría de los primeros cristianos veneraba paganamente, Mitra, y que la iglesia deseaba integrar como práctica cristiana. Pero lo más grave del asunto fue la falta de aritmética demostrada por Dionisius. Asignó el nacimiento de Jesús al año 1 sin que existiera un año 0 anterior en el calendario. Es decir, igual como hizo el Ministerio de Educación y Ciencia, se cargó el 0. Cuando alguien nace posee 0 años y pasado un año cumple su primer aniversario. Jesús fue distinto, fue un milagro. En el mismo momento de su nacimiento este ya tenía un año de edad, y pasados 365 días de vida, dos.
Aquel sutil error de la iglesia supuso que todos los posteriores cambios de siglo o milenio fueran siempre un año más tarde. El siglo II empezó en el 101 y no en el 100, el segundo milenio no comenzó en el año 2000, lo hizo en el 2001. Ven todo lo que ocurrió por eliminar un 0 de nuestro calendario. Pues ahora, y en las notas de secundaria un examen en blanco debería constar al menos con un 1 en lugar de un 0. Ese punto quizás signifique que el alumno supo traer el control a la mesa del profesor con la consecuente habilidad de saber como depositarlo allí. Así que para no traumatizar su esfuerzo se le regala un punto. Un docente de Barcelona escribía en una carta en prensa.
¿Y no deberíamos también poner un 11 a los alumnos 10 por su trabajo e inteligencia? ¿O para ellos las reglas del juego seguirían siendo siempre otras?
Dejando atrás este galimatías de ceros y unos, las calificaciones de insuficiente, suficiente, bien, notable y excelente siempre fomentarán la atención y el trabajo por varias razones. Primero, informaban a los padres claramente del nivel de su lechón; segundo, se da igual información al alumno; tercero, indica que estudiantes deben ser atendidos de forma diferencial; y cuarto, fomenta la cultura del deseo de superarse y del esfuerzo. En fin, busque aquel centro que impone notas claras y no eufemismos cargados de ambigüedades. En eso algunos institutos caen en diversificar las notas con demasiadas casillas que al final los padres les cuesta entender. Me explico, cuando en los boletines de notas se desglosan por materia más de tres casillas con su media al final, la madre y el padre tienen ante sí más de treinta notas que valorar sobre su hijo, algo que por exceso de información desinforma más que informa. Me refiero concretamente a los centros que detallaban por materia y en cada trimestre las calificaciones en conceptos, procedimientos, actitud y nota final, algo que fue creado por la reforma para facilitar las cosas y aprobar a un mayor número de alumnos. Huya por tanto de ese tipo de boletines y busque la información esencial, si su hijo aprobó o no. Conceptos, procedimientos y actitudes resultaron un invento que permitía unos juegos malabares para subir la media final de cada materia. De una forma grotesca pero también muy real podría ocurrirle lo siguiente.
Mi hijo cursaba primero de la ESO y un buen día trajo las notas del primer trimestre. Allí vi algo inverosímil, tenía muchos conceptos suspendidos pero las áreas aprobadas. Concerté entrevista con el tutor para comprender tal paradoja y me contó que mi hijo de estudiar nada de nada, pero traía los deberes realizados, quizás copiados, aprobando así los procedimientos. Añadía el docente que el comportamiento de mi zagal era ejemplar aprobando así la actitud. Por dicha razón la media le salía aprobada aunque fuera un ignorante. La verdad, como padre me sentí engañado. Con la EGB me timaron, allí o estudiabas o suspendías. El problema fue que a quien reclamaba por la estafa. Habían pasado más de veinte años y el delito había prescrito.
El boletín de notas debería ser claro y sin cosas raras por medio, de otra forma se está abonando el terreno del aprobado fácil, algo que en nada ayudará a nuestras generaciones futuras. Muchos alumnos aprendieron a calcular entre procedimientos y actitud para aprobar con el mínimo esfuerzo pero sin aprender demasiado en conceptos. El filósofo chino Confucio decía que nunca hagas apuestas. Si sabes que vas de ganar, eres un pícaro; y si no lo sabes, eres un necio. Por tanto la trilogía de notas conduce a la picardía, al no esfuerzo y al fracaso académico. Los docentes que defienden boletines con procedimientos, actitudes y conceptos muestran su falta de sensatez ante la obligación de enseñar con exigencia.
Por suerte, y tras doce años de quejas, la trilogía de notas se diluyó en el boletín que se entregaba a los padres. Durante el curso del 2007 - 2008 la ley permitía una sola nota por área en las evaluaciones trimestrales. Si algún centro mantiene el trípode de notas es iniciativa propia. Y si ahora algunos vuelven a los ítems es que algo se quiere cambiar pero sin mejorar el nivel de aprendizaje de nuestros escolares.
En resumen, y enunciando una síntesis de todos los párrafos anteriores, las causas escolares que pueden propiciar la pérdida de la cultura del esfuerzo son una primaria sin repetición, los exámenes por unidades, unas rebajas del nivel de exigencia, un exceso de optativas y unas notas trucadas entre otras muchas cosas. Analice en el centro de su hijo si todo ello se tiene en cuenta ya que el esfuerzo es la pieza fundamental que permite motivar, aprender y formar como adultos a sus zagales. Sin empeño la frustración hunde al más débil, y los psicólogos tienen muchos pacientes que no saben superar situaciones ñoñas de la vida. No obstante la capacidad de esfuerzo varía en cada individuo. A un púber quizás le vaya bien una amonestación para mejorar su rendimiento, mientras que para otros mejor una conversación tranquila. Para discernir qué aplicar a cada cual se necesita de un conocimiento profundo de cada escolar, y a ello hay que dirigirse ahora, a los alumnos.
sábado, 3 de septiembre de 2016
Fracaso escolar 25.Mucha optativa, poca enseñanza
El exceso de optativas también es un factor a tener en cuenta ante la crisis del esfuerzo. Inicialmente llamados créditos variables en la reforma, fueron asignaturas que dividían la clase en tres grupos unas seis o más horas por semana, ello obligaba a la dispersión de los púberes en diversas aulas por el centro. Si antes los escolares permanecían en una sola clase la mayor parte del tiempo, ahora sucedía todo lo contrario. Los cambios de sala eran frecuentes con la consecuente distorsión y algarabía que los adolescentes encontraban en ello por los pasillos del instituto. Los chavales que rondaban los doce jamás fueron lo suficientemente maduros como para dejarles tanta libertad de movimiento por un centro que llamábamos educativo. Actualmente las optativas han pasado de tres a una, es decir, volvimos a lo que ya funcionaba antes. Y sí, hay que innovar, pero no empeorar. En nuestro presente valore el centro donde se minimiza ese traspaso de alumnos por los pasillos. En tal caso la dirección del instituto suele aplicar medidas para que los cambios de clase sean los mínimos posibles. Entre tales se halla una distribución de aulas cercanas y acorde a los cambios de aula, unos grupos homogéneos de alumnos que vayan juntos el máximo tiempo posible y finalmente unos itinerarios en materias de cuarto de ESO y Bachillerato que no originen grupos satélite por el instituto en busca de su aula. Que las aulas de las optativas estén lo más cerca posible de las aulas de grupo reduce ostensiblemente la distancia a recorrer y el tiempo del mismo, que los grupos estén formados por los alumnos que van al mismo bloque de optativas también elimina muchos cambios de sala. Por otro lado, que haya materias asociadas a escoger impide que el alumno las mezcle a su capricho y favorece los grupos homogéneos y con motivaciones comunes.
martes, 30 de agosto de 2016
Fracaso escolar 24. Rebajas Corte Inglés
Otra de las medidas que hunde la cultura del esfuerzo es la rebaja de los niveles de exigencia. Se rumorea por pasillos y claustros que la reforma educativa redujo los niveles de la EGB para incentivar aparentemente el éxito académico en la ESO. Los defensores de la reforma, y de la inconsciente pedagogía teórica, afirmaron que no habían reducido la exigencia, que sólo habían redistribuido los contenidos. Pues si antes en octavo de EGB se enseñaba la ecuación de segundo grado, en la ESO se hacía dos años más tarde, ¿era eso una redistribución o un retraso? Si un tren llevara un retraso de dos años dudo mucho que ningún usuario se le ocurriera decir que se habían redistribuido los horarios. Por tanto, si alguien podía resolver ecuaciones de segundo grado a los 14 años en el sistema anterior, ¿por qué razón debía hacerlo a los 16 en la ESO? ¿No era eso estafarle al no explotar sus posibilidades? ¿Se le estaba formando o deformando? Un escolar desarrolla sus capacidades en función de lo que se le exige, no en lo que se le engaña.
Así pues con una ESO fácil debería haber aumentado el número de aprobados, por desgracia ocurrió todo lo contrario, cuanto más se bajó el nivel de exigencia, más descendió el nivel de aprobados por acomodamiento y falta de esfuerzo. En fin, que la LOGSE y sus descendientes tras aumentar la escolarización obligatoria hasta los 16 bajó los niveles pero sin aumentar el número de aprobados, algo que puso en evidencia que el problema no era el acceso a la educación, sino su aprovechamiento. Ante la realidad anterior el propio PSOE confesó en el 2004 que el nivel había caído estrepitosamente. Quizás pasó que a más fácil menos esfuerzo, a mayor comodidad menor aprovechamiento. Resulta imposible que un estudiante tenga éxito en sus aprendizajes si éste no se siente obligado a ello. Uno puede llevar un caballo al río pero no por ello el animal beberá. En conjunto parece como si el propio gobierno adoptara la posición del presidente de la Royal Society. En el Londres de 1807 los ilustrados querían una educación básica, y a cargo del Estado, para todas las masas obreras. En aquel momento el presidente de la Royal Society escribió lo siguiente.
El proyecto de dar una educación básica a las clases trabajadoras [...] les hará insolentes ante sus superiores; en pocos años el resultado será que el Gobierno tendrá que utilizar la fuerza contra ellos.
Por suerte la aparición del Estado moderno y la necesidad de trabajadores formados para el país mejoró las cosas. El primer Estado en darse cuenta de ello fue Prusia al implantar una enseñanza obligatoria. Con ello logró un país de buenos profesionales, progreso empresarial y un ejército que derrotó a Francia y unificó Alemania. En fin, que una enseñanza de calidad es la mejor inversión para un Estado.
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