CATALUÑA BAJO CERO

Se dice que el concierto económico de Euskadi y Navarra es de los mejores. Por desgracia, y son datos del ministerio de economía, esto no sucede con el Estatut catalán. Cataluña aporta mucho más de lo que recibe y esta solidaridad ha permanecido así durante décadas. Ahora, en plena crisis, y sin recibir las inversiones pactadas con el Gobierno español en el Estatut, se han levantado ampollas entre los catalanes. Muchos de ellos se preguntan que cómo ha podido suceder que en Euskadi, en donde una minoría sembró el pánico con el terrorismo, obtuviera mejor trato foral que quien lo ha hecho con una ley aprobada por comicios, el Estatut. Y es más, ¿cómo se entiende entonces el embate anticatalanista de algunos políticos españoles? Los catalanes disolvieron Terra Lliure, pactaron siempre con el Gobierno español y jamás propusieron una escisión del estado al estilo ETA, ¿cómo se entiende entonces esa aversión de muchos españoles hacia la barretina y las cuatro barras?¿hubieran preferido éstos una ETA catalana? Si Cataluña ha sido pacífica y ahora no percibe el dinero acordado con el Estado español, no se entiende el anticatalanismo de muchos. Un discurso moderado a tiempo puede evitar radicalismos innecesarios. Cataluña pide votar por su soberanía sin robar nada a España.