POBRES MAESTROS O MAESTROS POBRES

Se decía que pasarás más hambre que un maestro de escuela, una dicha que ahora se trasmuta en profecía. Desde el 1990 que el nivel adquisitivo de los docentes públicos ha ido cayendo paulatinamente, algo que no ha despertado en demasía las sospechas de los afectados. Todo empezó con los pactos entre patronal y sindicatos para equiparar nóminas entre pública y privada. Se aceleró las de unos, los privados, y se redujo la de los otros, los públicos. Luego el 2009 trajo un aumento del IRPF en las nóminas docentes, un eufemismo que reducía de nuevo el nivel adquisitivo de los educadores. Ahora llega el 2010 con los recortes ZP, otro porcentaje menos, un 5 de media. Lo paradójico a todo esto es la mastodóntica inversión en educación con las aulas digitales. En algunas comunidades se van a regalar portátiles a los alumnos, pero en todas se están sufragando una instalaciones impagables, todo el cableado y tecnología que ahora mismo se está instalando por las aulas de toda España, ¿puede imaginarse el coste de ello? Y he aquí la paradoja, por un lado se despilfarra en un proyecto sin antecedentes ni garantías educativas, y por el otro se recortan los sueldos de los educadores, ¿alguien se ha vuelto loco? Añadamos a lo anterior que no existe ninguna experiencia en el mundo que demuestre que con los libros digitales se resuelva el flagrante fracaso escolar que vivimos en la península, es más, la única prueba piloto que se hizo en Suecia demostró que con el ordenador los chavales se distraían y suspendían más, ¿va a ser eso defender des del PSOE la escuela pública? Lo cierto es que muchos dirigentes socialistas no predican con el ejemplo, sus hijos se hallan en centros educativos privados. Sólo un ejemplo, el presidente de la Generalitat de Catalunya tiene a toda su descendencia en un colegio cien por cien privado, que no concertado. En fin, predicar con el ejemplo se halla en ácida contradicción con una escuela pública ametrallada por quienes dicen que tanto la defienden, el PSOE.